¿Cómo se trata?
Aproximadamente la mitad de las personas con hipertensión arterial desconoce su condición. Por lo tanto, es importante monitorizar la presión arterial para poder controlarla antes de que se desarrollen problemas serios. El diagnóstico se basa en un patrón de presiones altas y no en una sola toma de en un momento dado. La hipertensión sistémica no se cura, pero se controla con medicamentos y con ajustes en el estilo de vida.
Los medicamentos, tales como los beta-bloqueadores (que relajan los vasos sanguíneos) y los bloqueadores de canales de calcio (que relajan los vasos sanguíneos), pueden ayudar a bajar la presión sanguínea sistémica. Se pueden recetar otros medicamentos, como anticoagulantes y diuréticos (reducen la retención de líquido y ayudan a desechar el exceso de sal). Frecuentemente, se obtienen mejores resultados al combinar los medicamentos.
Para controlar la hipertensión, puede ayudar un programa de ejercicios y una dieta baja en sal. |